7 consejos para mantener tu carretilla elevadora y ser más productivo

En cualquier almacén o centro logístico, la carretilla elevadora es una herramienta que no puede faltar.
Su correcto funcionamiento no solo garantiza la seguridad del operario, sino también que consigas esa productividad que andas buscando.
Por eso queremos darte los 7 consejos que necesitas para mantener tu carretilla elevadora en perfectas condiciones y asegurar el máximo rendimiento en tu operativa diaria.
-
Comprobar los elementos claves
Antes de poner en marcha cualquier carretilla elevadora, es fundamental revisar los componentes esenciales que pueden afectar a su seguridad y funcionamiento:
-
Ruedas y neumáticos: deben estar en buen estado y con la presión adecuada.
-
Frenos: su respuesta debe ser inmediata.
-
Horquillas: sin grietas ni dobleces visibles.
-
Dirección: debe funcionar con fluidez y sin ruidos extraños.
Realizar esta comprobación diaria ayuda a detectar fallos antes de que se conviertan en problemas mayores.
-
Realizar las revisiones periódicas
Toda carretilla elevadora debe pasar revisiones técnicas con una frecuencia determinada por el fabricante y por la normativa vigente.
Estas revisiones permiten detectar desgastes internos, fugas hidráulicas o fallos eléctricos que no son visibles a simple vista.
No olvides llevar un registro detallado de estas inspecciones para garantizar el cumplimiento de las obligaciones legales y alargar la vida útil del equipo.
-
Cambiar las piezas y componentes que se deterioren
El uso diario provoca el desgaste de componentes como:
-
Filtros de aceite y aire
-
Cadenas de elevación
-
Rótulas y cojinetes
Utilizar repuestos de calidad es esencial para mantener la fiabilidad de la máquina. Además, anticiparse al fallo de un componente puede evitar paradas innecesarias o averías costosas.
-
Comprobar los indicadores de señalización e iluminación
Una carretilla debe ser siempre visible y comprensible para quienes trabajan cerca de ella. Revisa que todos los indicadores luminosos y acústicos funcionen correctamente:
-
Luces de trabajo delanteras y traseras
-
Luz de advertencia intermitente (rotativa o LED)
-
Indicadores de batería o temperatura
Estos elementos no solo mejoran la seguridad, también evitan sanciones en caso de inspecciones.
-
Control de nivel de ruidos
Un incremento en el nivel de ruido puede ser síntoma de un problema mecánico, como una transmisión defectuosa o falta de lubricación.
Además, trabajar con equipos ruidosos puede afectar al confort del operario y aumentar el riesgo de accidentes por falta de comunicación.
Si notas un sonido fuera de lo habitual, haz revisar la máquina de inmediato.
-
Deterioro de los elementos de carga
Las horquillas, tableros portahorquillas o los sistemas hidráulicos que elevan la carga deben mantenerse en perfecto estado.
Cualquier deformación o grieta puede suponer un riesgo importante durante la operación. Si detectas un desgaste excesivo o funcionamiento irregular, sustituye la pieza cuanto antes.
-
Limpieza periódica
Una carretilla limpia no solo da una mejor imagen, también permite detectar fugas, grietas o acumulación de polvo en zonas críticas. La limpieza debe incluir:
-
Carrocería
-
Motor y componentes eléctricos (con los cuidados adecuados)
-
Sistema de refrigeración
-
Cabina del operario
Además, una limpieza regular evita que la suciedad afecte a los sensores o a los sistemas hidráulicos.
Mantener tu carretilla elevadora en buen estado no es solo una cuestión de seguridad, sino una forma directa de mejorar tu productividad y alargar la vida útil del equipo.
La prevención siempre será más rentable que la reparación. Si necesitas recambios de calidad para tu flota, en nuestra tienda online encontrarás todo lo que necesitas, con el mejor asesoramiento y envío rápido.
Visita nuestro catálogo de repuestos para carretillas elevadoras y asegura el rendimiento de tu maquinaria hoy mismo.
Deja un comentario